jueves, enero 12, 2006

Anoche cuando dormías
salté al otro lado de la cama
en un abrir y cerrar de ojos
cambiamos las arrugas de las sábanas

la distancia y la noche largas como faldas
abrían sus garras
mientras yo cruzaba fronteras inexistentes entre las almas


tu boca y mi boca como un ocho acostado
ahí entre las manos de un deseo perverso
trasnochado
entre botellas vacías, música, melancolía
desde un lugar que es nostalgia
sillas a veces vacías


junto a la ventana la luna redonda bailando
allá abajo en el charco mientras la lluvia despacito
se despide... cantando

1 comentario:

Máximo de la cruz dijo...

muy inspirador,para estos dias que vivimos en inviernos tan crudos y solitarios.