De la serie belga... intenciones...

Papi papito, papi papito, papi papito corazón... así iba el heladero por aquellos años, in illo tempore, por Miramar... todos los árboles antes fueron semillas... así desde algo tan chiquito la comunión con el Absoluto... raíces, savia, ramas, troncos, hojas, flores, semillas... nuevamente el ciclo... mientras se posan árboles, gusanos, cruza el viento, alguien toma sombra, un perro mea... así la vida... con el anillo de Moebius que me hace continuar con los sueños... primero parar, sentir, escuchar (lo de adentro, lo de afuera), y así dejarme SER...

En este presente simplemente viendo como los caminos se abren, el agua termina en el mar... así en unas horas llegar al pueblito chiquito en Francia, Cambrai... llegar al Santuario de Schoenstatt esta vez con Él, no con el sueño de Él... así juntitos hacer el trayecto... simplemente para dar gracias porque algo en este Universo propició nuestro encuentro... allí los dos Pocolocos flotando en el Universo como aquella vez en Bayahíbe...

Así llegar al pueblo y caminar, caminar... descubrir los lugares, las reposterías que hacen que la niña dentro de mí quiera todo pero ya... la mochila llena de pan, cremas para la cara, las fotos, las de él, las mías... un día entero sin parar de hablar, de combinar el inglés con el francés, con el dominicano con el flamenco... guay mi mai!!!!!!!!!

Mientras el heladero se llama Ruiz... mientras veo varios anuncios de Voyager a la Republique Dominicaine, mientras veo café dominicano orgánico... y el corazón brincaquetebrinca... yo me río, lo beso y el me besa también... todavía no sabemos como llegar al carro, total nuestra guía es interior... los helados lo demuestran... se sueña, se tiene, se vive el presente, se agradece... gracias Chucho!!!!!

Foto por Florecita, Heladero en Cambrai, Francia en octubre de 2008.