De la serie lo que voy creando... mi reflejo...

Hoy no está lejos, tampoco cerca, la conversación será sostenida frente a un café y unas tostadas, desayunaremos, hablaremos luego de 7 semanas cada cual viviendo a 5 horas de diferencia... y lo primero será el abrazo, un largo y apretado abrazo... tanto tiempo, tanta vida...

Y te contaré del paseo al Jardín Botánico, de como fue haberme montado nuevamente en el trencito, chú, chú... de cómo caminando bajo el sol salió la foto, con una risa, con la carcajada... es ese mi reflejo? o será el reflejo de tantos mundos, tantos seres que me habitan?

No sé como extrapolar estas largas conversaciones que han estado llenas de dolor, de complicidades, de cafés con hielo, de lugares abiertos para que puedas fumar... no sé lo que traerá esta mañana el barco... sólo sé que el amor vuela, que anda mezclándose con mi perfume, que hay tantos sueños en común para ese otro lado... se abren las velas y sopla el viento... siempre hay marineros en el mar... aunque sea soñando con un mejor día...

Lo curioso es que ayer tarde una ballena y su cría salieron del camino establecido, la manada al norte y ellas al sur... el sur que tanto me gusta y que me hizo fuerte... jugando con las aguas, construyendo sus caminos... yo que soy delfín y mi sombra parece humana, yo que soy un hada y mis alas parecen brazos, yo que te tengo tanto y a veces el miedo me llega... y la sombra juega, como una llama, bailando, consumiéndose... cierro los ojos... y el azul me llega, me llena... te voy queriendo... y no es juego...

Foto por Florecita, Reflejo en el jardín japonés, Jardín Botánico. Febrero de 2007.